La tabla de multiplicar detrás de la libreta y los cuadernillos Rubio

Justo en la última hoja de cualquier libreta que se preciara, venía la tabla de multiplicar. La de ratos que nos habemos pasado mirándola y estudiandola, por eso tal vez, su imagen sigue tan viva en las memorias. La del nuevo como siempre la más complicada y la del cinco la más facilita:

Caligrafía Rubio, que ayudaba a cuidar la escritura y a que en el futuro tuvieras una letra bonita. Ahora que lo pienso lo de vertical será como escriben los moros?? Bien, el caso es que ha llegado hasta nuestros días y si te bajas a la papelería de la esquina de tu barrio, fijo que la siguen teniendo.

Muy importante y para tener en cuenta, como había que coger el lápiz o bolígrafo, la manera correcta y la incorrecta. Hay ocasiones en las que ves a políticos y a gente que se supone con educación y culta y... que cogen el bolígrafo en un "puñao". Aquí se miraba mucho no como saliera la letra, si no que la forma de coger el lápiz fuera la adecuada:

Uy los dibujitos de las portadas de las libretas naranjas!! Porque las había verdes y las había naranjas, a mi las naranjas me encantaban. Con su raya en la parte inferior de la libreta para que pudieras colocar tu nombre y tus apellidos, como Dios manda:

Por la parte de atrás venía un texto o historia, el caso era no desperdiciar ni un trocito de libreta, todo era sapiencia e imaginación: