Grey el sadomasoquista

Yo no soy sadomasoquista como Grey, esto es todo lo que quiero contar de mi vida sexual», dice Niall Leonard, el marido de E.L. James (pseudónimo de Erika Leonard), distanciándose de Christian Grey, el protagonista de Cincuenta sombras, la saga erótica que escribió su esposa.

«¿Qué si tenemos un calabozo en casa? ¿o una habitación roja para el dolor? Tal vez, y tal vez también tengamos un helipuerto en el tejado de nuestra casa por si Christian Grey [el protagonista de la trilogía de su esposa] decidiera aparecer para recibir unos azotes», ironiza en un artículo que publicó en The Guardian.

«Todo el mundo sabe que Cincuenta sombras de Grey no es más que una fantasía», asegura, «¿acaso la gente persigue a J.K. Rowling [la escritora de Harry Potter] por la calle por si tiene un espejo mágico?». Hace apenas unos meses nadie le conocía más allá de su círculo de trabajo y amistades.

Desde que estalló el éxito de Cincuenta sombras, trilogía de la que en pocos meses se han vendido 15 millones de ejemplares en todo el mundo, se ha convertido en el marido E.L. James. Parece que cualquier cosa que toca su esposa se convierte en oro. Ahora es Leonard quien acaba de publicar su primera novela en Reino Unido: Crusher.

La novela había creado cierta expectación por saber si sería la versión masculina de Cincuenta sombras. Pero no tiene nada que ver. Se trata de un thriller para adolescentes con bastante sangre.

Leonard ha concedido diversas entrevistas a medios británicos que, como era de prever, se han centrado en su vida sexual y en saber si él es la persona en la que se inspiró su esposa para el personaje de Grey, el rico hombre de negocios que seduce a la colegiala Anastasia Steele.

«Claro que no». A Niall no le gusta hablar de su vida sexual. No así a su esposa, que en una conferencia dijo que en una ocasión, su marido quiso imitar la escena de Grey y subió al dormitorio con un abrelatas para dar libre albedrío a sus fantasías sexuales. «Aquella fue la primera y última vez que intentó una cosa así», bromeó Erika (E.L. James).